Sin luz no había universidad Pero con salarios de pobreza, ¿sí la hay?
Solo desde la asunción del gobierno de Milei hasta la fecha hemos perdido 62 puntos de nuestros salarios. El cargo testigo –que equivalente a la jornada de un maestro- es de $280.015 (sin descuentos). La mayoría de la docencia que trabaja como ayudante de primera percibe un salario de $140.000. Incluso en un cuadro de hundimiento salarial de todxs lxs trabajadorxs, el de los docentes universitarixs y preuniversitarixs es una catástrofe.
Frenamos en parte el ataque político de Milei y sus funcionarios que diariamente calificaban de “centros de adoctrinamiento” a las universidades. Se logró un incremento para garantizar el funcionamiento mínimo de las universidades y colegios. Pero no pudimos quebrar una política que agravó a niveles de pobreza la caída de nuestros salarios.
Las gestiones universitarias, apenas se logró como resultado de la lucha un incremento en las partidas de funcionamiento, declararon al unísono que se había resuelto el reclamo presupuestario. Pero si nuestros salarios y de los no docentes representan el 90% del presupuesto y seguimos en picada, ¿de qué conflicto resuelto hablan? Sin luz no había universidad. Pero con salarios por debajo de los niveles de pobreza, ¿sí la hay?
La AGD viene reclamando que la CGT y CTAs convoquen a un plan de lucha nacional para quebrar el “ajuste más grande de la historia de la humanidad” tal como se vanagloria Milei y su gobierno. Por eso participamos activamente de los paros del 24 de enero y el 9 de mayo o del paro de la docencia de todos los niveles el 26 de febrero. ¿Alcanza con paros nacionales aislados sin un plan de lucha nacional? ¿Se puede derrotar una ofensiva de esta naturaleza sin una movilización del conjunto de lxs trabajadorxs ocupadxs y desocupadxs?
La docencia universitaria y preuniversitaria llevó adelante paros y clases públicas que prepararon la marcha –las marchas en todo el país- más grande de la historia reciente. Logramos conformar un Frente Sindical de Universidades Nacionales con la participación de todas las federaciones no docente y docentes. Pero, más allá de la posición de nuestra Federación, el Frente Sindical, en lugar de profundizar las medidas, entró luego de la marcha universitaria en un impasse a la espera de una convocatoria que nunca se concretó y de la que no surgió oferta alguna salvo porcentajes de miseria impuestos por el gobierno.
Y ahora, en el cierre de este primer cuatrimestre de grandes luchas, en lugar de nuevos paros, el Frente convoca a esta jornada de 72 hs. de visibilización. Hagamos reuniones en cada lugar de trabajo para deliberar entre todxs cómo seguimos luego del receso. Para AGD es fundamental el debate entre compañerxs y nuestrxs estudiantes, que expliquemos que sin salarios no puede haber universidad –o la universidad continúa funcionando sobre nuestra precariedad. Que ya empecemos a preparar un no inicio para el segundo cuatrimestre en los colegios y todas las universidades del país hasta conquistar nuestros derechos. El 27, tal como decidió nuestra asamblea, si se discute la Ley Bases en Diputados, paramos y concentramos frente al Congreso
Más que nunca, necesitamos fortalecer nuestra organización y defendernos de manera colectiva. AFILIATE A LA AGD