Allanamientos en los barrios populares desde la madrugada, bajo noche cerrada, extendidos en algunos casos hasta las horas de la tarde, con malos tratos y violencia inusitada, con autos sin patente y métodos ilegales, “un mamarracho jurídico”, como denunció la abogada de APEL, Liliana Alaniz, secuestrando incluso materiales que no estaban apuntados en la orden judicial.
La descripción que hicieron ayer los movimientos sociales en la conferencia de prensa en la Plaza Congreso –donde estuvo presente nuestro sindicato- constituye una persecución política que pretende invertir la carga de la acusación: quienes reclaman en las calles por el hambre en los barrios pasarían a ser los culpables; los culpables, quienes desde el Ministerio de Capital Humano dejaron de enviar viandas a los comederos, los acusadores.
El gobierno que hambrea pretende encausar a todo el movimiento piquetero: estas acciones intimidantes se practicaron contra el Polo Obrero, FOL, UTEP, Barrios de Pie y Movimiento Evita, entre otros.
La AGD denuncia esta operación de criminalización de los sectores populares que se organizan para defender sus derechos y contra las políticas siniestras de este gobierno. Exigimos el cese de una persecución política; denunciamos a los medios que se suman a esta campaña y que tienen acceso al expediente que desconocen los inculpados y sus abogados; nos sumamos a la exigencia para que se dé satisfacción a los reclamos de los movimientos piqueteros.
Basta de perseguir a los que luchan.