El pasado 19 de marzo de 2022 en Rawson, Chubut, se conoció el veredicto que absolvió a tres jóvenes acusados por una violación grupal en una fiesta ocurrida en la localidad de Playa Unión en 2012, por “falta de pruebas” y el beneficio del principio de inocencia.
Repudiamos este fallo bochornoso e insólito y todo el proceso judicial que estuvo plagado de estereotipos, misoginia, sesgo de clase. Todas las mujeres que declararon fueron sometidas a interrogatorios violentos por más de 2 horas. La víctima que declaró al momento de hacer la denuncia, fue sometida a una pericia durante tres días de 6 horas cada día, ante 7 peritos de los defensores y la fiscalía; debió responder más de 567 preguntas y a evaluaciones sobre su personalidad. Los imputados, hijos de familias poderosas de la provincia, jamás se sometieron a ninguna pericia ni respondieron a ninguna pregunta. Declararon ante las juezas y dijeron lo que quisieron sin responder a ninguna pregunta.
Hace unas semanas nos conmocionábamos por el hecho aberrante de la violación grupal a plena luz del día en el barrio de Palermo, un caso en el que la intervencion de comeriantes y vecinxs logró que cese el abuso y se detenga a los violadores. Días después un tribunal absolvió a tres personas por un hecho de similares características porque considera que “no hay pruebas”, aún con declaraciones de más de 100 personas. Nos queda claro entonces que el Estado actúa revictimizando a quienes sufren abusos y apañando a quienes los perpetran, por eso denunciamos la responsabilidad estatal y llamamos a profundizar la organización y la lucha contra todas las formas de violencia que este régimen descarga sobre mujeres y diversidades sexuales.