Dos operarios muertos y una docente en estado grave
En la Escuela Albergue N° 144, en Aguada San Roque, provincia de Neuquén, se produjo una explosión de gas, en la que murieron dos operarios que realizaban tareas de refacción y una docente se encuentra en estado muy grave. Un rato antes, se habían retirado los alumnos.
Esta semana, el gobernador Omar Gutiérrez y su ministra de Educación Cristina Storioni impusieron una vuelta a la presencialidad sin tener en cuenta las condiciones epidemiológicas. Pero, además, como lo muestra dramáticamente este caso, sin las más elementales condiciones de infraestructura porque todavía no había concluido la obra.
Asistimos a la reedición del crimen de Sandra y Rubén, en Moreno, apenas tres años atrás, cuando gobiernos y ministros se mostraban consternados o se comprometían, como lo hizo el ministro Trotta, “A garantizar las condiciones edilicias de las escuelas y la seguridad de la comunidad educativa para que nunca más se produzca una explosión”.
Los campeones de la defensa de la educación y de la presencialidad sin condiciones son responsables del histórico desfinanciamiento de la educación pública, de la precariedad de los edificios escolares, de la falta de garantías para la vida de docentes, estudiantes y personal administrativo.
El gobierno de Neuquén es responsable directo de estas muertes que se podían haber evitado.
AGD se suma a los reclamos por el inmediato esclarecimiento del hecho y por la renuncia de la ministra Storioni. Apoyamos el paro y la movilización de la docencia neuquina por estos reclamos.